Aguja del Bisbe de Santa Linya

Una actividad que compagina un pequeño barranco seco, una espectacular escalada en una aguja estrecha como la de muchos sueños y una pequeña ferrata. Todo esto rodeado de una tranquilidad (rota por los dos trenes que pasaron y alguna moto ruidosa) y de un paisaje espectacular con el pantano de Camarasa bajo tuyo. En una época con más calor, se puede acompañar con una buena sesión de chapuzones.

La verdad que por falta de tiempo no me voy a entretener a explicar todo el recorrido que hicimos, y pongo el enlace al blog de Rocjumper, donde lo explican de maravilla. Haré un resumen de cuatros fotos y una explicación más detallada de la escalada pura y dura.

Barranco de aproximación a la escalada

Son dos rápeles uno de 25m.

Y otro de unos 40m

Una vez en su base bajamos unos metros y llegamos encima del túnel del tren y a nuestra derecha aparece esta belleza.

Vía Normal a la Aguja del Bisbe

Zona: Santa Linya

Dificultad: 6a+ (Ae/V obligado)

Recorrido: 45 metros

Grado de exposición: Bajo

Grado compromiso: Bajo

Equipamiento: Parabolts.

Material: 7 cintas exprés.

Orientación: Sur

Valoración: Muy buena aunque se hace corto.

L1 (IV+) 8m: Una vez en el collado, tenemos dos opciones, o seguir recto por tres bolts visibles o subir por la izquierda protegido con un único parabolt, pero lo más difícil es llegar a este bolt, después es una canal fácil aunque algo rota que gira a la derecha para estar la reunión encima del collado otra vez.

L2 (6a+ o V/Ae) 25m: Subimos encima de una pequeña aguja al lado de la R y viene un tramo derecho con muy buen canto. Los seguros están cerca y es factible probar. Una vez cogemos el tercero, hay que cambiar a la vertiente de la izquierda para escalar más fácil hasta un nuevo muro de 2 metros asegurado con dos bolts que con una tibada te deja en una repisa con R a la derecha algo escondida.

L3 (V) 12m: Subimos por una fisura-diedro jugando con el equilibrio y las buenas presas, para llegar a la R unos metros por debajo de la cima. Arriba en la cima hay varios bloques que aunque sean grandes se mueven y no nos podemos fiar de subir los dos de cordada arriba. Así que primero subí yo y después Lau para echarnos unas fotos con el palo selfie. Unas imágenes con Dron hubiera sido la ostia.

Una vez en la cima, un único rápel de unos 50m hasta el mismo collado de inicio de vía, y retorno a buscar la vía ferrata.